Presentación de Ana María Rodríguez: Vamos a
darle la cordial bienvenida a Natalia Lévano. Pero antes, nos vamos a ir al
Teatro Nacional de Mannheim.
Ana María Rodríguez: Esa es la
voz de Natalia Lévano Casas, interpretando uno de sus papeles, en una obra que
presenta el Teatro Nacional de Mannheim: Hoffnung auf größeres Wohlbehagen. En
el marco de algo que a mí me pareció sensacional, y es el Mannheimer
Bürgerbühne , y para hablar sobre el Mannheimer Bürgerbühne y más
exactamente sobre este proyecto: Hoffnung auf größeres Wohlbehagen, tenemos
aquí a Natalia Lévano Casas, que es latinoamericana, peruana, nacida en Lima, y
trabaja en Studium Generale de la Universidad de Mannheim y en el Sprachlabor de la
Universidad de Heidelberg.
Ana María Rodríguez:
¡Bienvenida Natalia! Muy buenos días.
Natalia Lévano : ¡Buenos
días! Gracias por la invitación.
Ana María Rodríguez: Con
muchísimo gusto. La verdad es que fue un placer enorme estar presente en una de
tus presentaciones, y darnos cuenta que la multiculturalidad está presente en
Alemania en todo su esplendor. Precisamente
hablando sobre esta sociedad heterogénea y multicultural, y sacarle provecho a
esa expresión artística desarrollada por actores no profesionales que es lo más
interesante de este proyecto de la Mannheimer Bürgerbühne (Teatro de los
Ciudadanos).
Ana María Rodríguez: ¿Cómo
nació la idea de unirse al proyecto de Bürgerbühne/teatro de los ciudadanos?
¿Cómo te enteraste de esta iniciativa?
Bueno, primero creo que el Teatro de
Ciudadanos nace en Dresde, y el teatro de Mannheim de la Bürgerbühne hace dos
años. Vi un aviso en facebook que decía que necesitaban a gente para participar
en un proyecto de teatro con gente de otros países, o como se dice con
“Migrationshintergrund”. Y bueno, ni corta ni perezosa decidí presentarme, no
sabía, ni yo, ni ninguno de mis compañeros que íbamos a ser seleccionados. Tampoco
sabíamos, ni sabemos cuáles fueron los criterios del director Dominic Friedel y
la dramaturga del teatro Stefanie Bub, fue muy rápido, pero eso nos
alegró muchísimo.
Ana María Rodríguez: ¿Cuál es
la historia que narra Hoffnung auf größeres Wohlbehagen? ¿Qué papel
interpretas en esta pieza de teatro?
Mmm...Es un poco difícil ...Hoffnung auf
größeres Wohlbehagen no es una obra ya escrita y publicada , con un primer
acto, segundo acto, etc., epílogo y con escenografía descrita por el autor,
nada de eso, sino que sale en realidad de cartas existentes del siglo XIX
, cartas de alemanes que emigraron a los Estados Unidos en busca de un mejor
destino, de fortuna. Claro, es interesante porque sobre todo en la zona
del Palatinado hubo muchos flujos migratorios. Los flujos migratorios y todo
eso se realizaban claro, en barco, aventura y peligro de semanas. Por eso
nuestra puesta comienza con una invitación coral para embarcarse y abandonar
estos sitios. En la pieza hay canciones históricas y melodías ya existentes,
pero también canciones propias, tocadas, cantadas y contadas por nosotros
mismos. Es decir que representamos tanto a los que se fueron y a los que
vinieron. También participan los nacidos aquí, contando sus historias.
Mis papeles son varios, para no perder el
hilo, la que por ejemplo descubre la llegada al nuevo país, que podría ser yo
misma cuando me fui por primera vez a Moldavia o a Ucrania para el asombro de
toda una nueva cultura y nuevo mundo. Después lo que has puesto antes, por
ejemplo, en youtube, soy la que describe a la gente en el nuevo país,
describo como alemana a los estadounidenses , pero más bien en ese momento
pienso como peruana en los alemanes.
Ana María Rodríguez: Es
interesante para aquellos que la hayan visto y para aquellos que tengan
curiosidad de verla, esa doble posibilidad de interpretación de cada uno de los
personajes, porque así como estás interpretando en ese momento a una alemana
que está llegando a Estados Unidos, así también estás representándote a ti
misma . Lo digo como espectadora, tú lo dices como actriz yo lo digo como
espectadora.
Natalia Lévano Casas: Ese ir y
venir, eso es interesante en la obra, a pesar de que pareciera muy
estático, pero hay movimiento permanente. Eso es lo que ha conseguido el
director con cada uno de nosotros.
Ana María Rodríguez: ¿Cómo ha
sido esa experiencia de trabajar en un grupo multicultural y con la batuta de
un director tan consagrado y con un equipo de gente tan profesional?¿Cómo ha
sido la integración de este grupo?
Lo de grupo multicultural, además, sí
somos de varios países, de Venezuela, de Eslovaquia , de Bosnia, de diferentes
países, pero más que nada para mí, no fueron solamente la diferencia de países,
sino las diferentes experiencias vividas por cada uno de nosotros. Lo
importante es que el director ha encontrado semejanzas en ese proceso.
Personalmente para mí , lo más importante fue el haber tenido a
profesionales de primera, tenerlos a nuestro lado guiándonos, no somos
actores profesionales, eso fue desde un principio. Pero volviendo a la idea de
grupo multicultural, me gusta porque durante este tiempo, ocho semanas
intensas, es donde más he hablado alemán en todos estos años en Alemania. El
equipo del teatro tenía alemanas, salvo un hombre, Dominic, el director,
alemán, y la encargada del vestuario, de los EE.UU.
Ana María Rodríguez: Lo interesante es ver los matices de cada uno de los personajes que
interpretan sus papeles con su acento, de su procedencia, eso es bien bonito ,
bien colorido. Aparte de la presencia que tiene cada uno en el escenario.
Formando un equipo absolutamente maravilloso. Yo por lo menos quedé muy
gratamente sorprendida.
Ana María Rodríguez: ¿Cómo fue
ese proceso de llegar, tú nos contabas al principio que esta no es una obra
escrita con inicio y fin, sino que es una obra inspirada en cartas que fueron
enviadas por personajes que se fueron a buscar una nueva vida , cómo hizo
el director para generar las escenas que quedaron definitivas? Es decir, yo
supongo que hay un trabajo por detrás gigantesco. ¿Cómo fue todo ese proceso de
preparación?
No tengo al director a mi lado (risas mías)
, bueno , lo que yo he visto, no he visto el trabajo todo el
momento, del director, de la dramaturga, del equipo todo. La primera vez
entrevista de 20 min con grupos de cinco. Con entrevistas personales, diálogos,
etc. Incluso una vez llegué a pensar en una de las entrevistas de que se
trataba de la Oficina de Extranjería. ¡De verdad! No, yo no voy a decir nada.
Algunos ya venían con la historia bajo el brazo, querían contar su historia, su
experiencia vivida, sus historias de amor , de falta de trabajo, etc., hay de
todo en la obra.. Contaron desde un principio historias que impresionaron al
equipo del teatro. Yo no conté tan rápido mi historia.
Lo que me gustó mucho fueron por
ejemplo las llamadas por teléfono, preguntando cuánto mido, cuánto peso para ir
ya preparando la ropa. Al principio llegar al lugar de los ensayos y ver fotos
de los alemanes del siglo XIX en los Estados Unidos, recuerdo que le dije a la
escenógrafa y encargada del vestuario Linda Johnke, que una de las mujeres de
la foto era impresionante por la fuerza en la mirada, y ella me dijo : “Justo
un vestido así estoy pensando para ti”. Yo estaba viendo los ojos de esa joven
mujer y no el vestido. (se le veía la energía de comenzar algo sin miedo, como
diciendo ¡vamos! ¿qué viene ahora?).
Eso fue mucho, sacaron por ejemplo,
abreviaron cartas o juntaron cartas, o las historias también las abreviaron,
las tenían ya, a veces las sacaban. Va, ¡fuera! Era loquísimo eso.
Por ejemplo, personalmente yo tuve que
cantar. Canté una canción de mi tío Pablo Casas que recuerdo cuando era
pequeña, canción que gustó al director pero la sacó porque no iba con el
conjunto. Es todo parte de un proceso creativo y difícil , ¿no? Se puede describir
como cuando uno pinta un cuadro y te decides por otro color, el primer color ya
no se ve, y se ve otra imagen y otros colores.
Ana María Rodríguez: En ese
ejercicio de quitar y poner escenas. Ustedes mismos como actores, digamos, no
profesionales, descubrieron ustedes cosas de ustedes mismos.
Ufff, muchísimas. Es como si fuera un...,
incluso a veces parecía, no sé, una terapia. Aparte del curso de alemán, la
clase de conversación. Sí, era una terapia. Perder la timidez, yo soy en
realidad una persona bastante tímida. Escuchar al director decir “no te
escondas”. Eso era fascinante. Mmmm...me descubrió. Eso fue interesante.
Ana María Rodríguez: ¿Cuál es
tu próximo proyecto teatral? ¿En qué obra nueva vas a participar?
El próximo proyecto teatral es seguir
haciendo teatro. No sé dónde ni cómo, porque lo de la Bürgerbühne solo te da la
posibilidad de actuar una vez. Tengo un proyecto en mente que si resulta te lo
mencionaré más adelante. Estoy escribiendo un texto.
Pero, lo principal, antes de que me olvide,
el próximo reto que es el Festival de Teatro Ciudadano que tendrá lugar en
marzo de 2015, del 20 al 27 de marzo en Mannheim. El Teatro Nacional de
Mannheim será esta vez el teatro anfitrión. El primer Festival de Teatro
Ciudadano se realizó en Dresde en mayo de este año, con mucho éxito. En
marzo habrá doce puestas de diferentes grupos. De Mannheim estaremos nosotros
con Hoffnung auf größeres Wohlbehagen, vendrán grupos de Berlín, de Karlsruhe
(Badisches Staatstheater Karlsruhe), Dresde, claro como iniciador de este tipo
de teatro, de Dinamarca, etc.
Ana María Rodríguez: ¿Cuándo y
en dónde podemos disfrutar de la obra? ¿Cuánto cuestan las entradas?¿
Cuál es el enlace para obtener más información al respecto?
Las próximas fechas de nuestras presentaciones
son hoy , el viernes cinco de diciembre, y el día martes 30 de diciembre. Para
hoy hay muchos sitios así que vengan a vernos. Las funciones siempre son a las
ocho de la noche. El día 30 es un día ideal para despedir el año 2014 con la
esperanza de un mejor 2015. Todas las presentaciones se realizan en Studio, así
se llama el local, está al lado del Teatro Nacional de Mannheim. Desde la
estación de trenes es muy fácil llegar con el tranvía 5, o a pie.
Las entradas para estudiantes cuestan 9 euros
, para el público en general 15 euros. Hay también rebajas a partir de grupos
de diez.
Más información en la página del Teatro
Nacional de Mannheim:
Ana María Rodríguez : Muy bien,
así que para aquellos que estén interesados en ver a Natalia Lévano Casas sobre
el escenario interpretando sus múltiples papeles.
Natalia: ¡De
hombre!¿no?, también.
Ana María Rodríguez: Con
un cigarro en la mano, y fumando.
Ana María Rodríguez : Bueno,
y finalmente, pues no sé, ¿alguna reflexión que quisieras acernos al respecto
,con nosotros para finalizar?
Yo hago el papel de hombre, no quiero
hablar mucho de eso, de mi papel de hombre, lo que me gusta, fue un papel de
último minuto, y es tan actual, porque es un hombre que mata, que tiene todo a
la mano, mejor dicho la escopeta a la mano para acabar con todo y apropiarse de
todo más o menos, por ejemplo una frase que digo: “Es hat noch viele
indianische Heyden in diesem Land. Es ist aber ein faules Zigeunervolk. “ , se
parece tanto a una como la frase que dijo la exdiputada mexicana Marilí Olguín
hace unos días, refiriéndose al caso de Iguala “Mátenlos para que no se
reproduzcan “. Ese ir y venir, desgraciadamente, tan presente.
Ya que mencionas la palabra reflexión y la
pieza en la cual actúo tiene la palabra esperanza en sí: Hoffnung auf größeres
Wohlbehagen (Esperanza por un bienestar mejor), quiero dedicar mi pensamiento a
los 43 estudiantes desaparecidos y a los estudiantes asesinados en Ayotzinapa,
ellos desaparecieron el 26 de septiembre, y el estreno de nuestra pieza teatral
también fue el 26 de septiembre.
Ana María Rodríguez: Muy conmovedora esas palabras tuyas, y nos unimos a esas palabras
tuyas también.
Natalia, te agradecemos muchísimo el que
hayas estado con nosotros en este programa. Y te invitamos a que presentes
unacanción que ibas a cantar , pero que no estuvo en el repertorio.Aparte es
una historia muy bonita. Es una canción compuesta por una persona muy especial
de tu familia.
Natalia
Lévano Casas: Era mi padrino y tío abuelo. Bueno, la
canción se llama Anita, es un vals, y como en nuestra historia Hoffnung
hay una canción de amor en turco, que es fabulosa, entonces ésta podría haber
ido, pero no fue. No recuerdo si era Anita la canción que cantaba, y como la
pieza nuestra es también recuerdo , el volver , el ir, entonces por eso la
propuse.
Ana María
Rodríguez: ¡Gracias Natalia!
Natalia
Lévano Casas: Yo soy quien les
da las gracias. ¡Nos vemos en Studio!
En este enlace hay dos canciones de mi tío
abuelo Pablo Casas Padilla, la primera es Anita.
Mehr über die Bürgerbühne und unseres
Stück:
Mission Statement Mannheimer
Bürgerbühne
Die Mannheimer Bürgerbühne (MBB) als sparten- und
generationsübergreifendes Angebot am NTM versteht sich als Wegweiser für das Stadttheater
der Zukunft in einer heterogenen und multikulturellen Gesellschaft und verfolgt
das Ziel, innovative künstlerische Ausdrucksformen mit nicht-professionellen
Darstellern zu entwickeln. Die MBB lädt alle Menschen ein, unter
professionellen Bedingungen, gemeinsam mit Künstlern und Mitarbeitern des NTM,
Theater in unterschiedlichen Formaten zu entwickeln und zu erleben.
Die Alltagsexpertise des Bürgers findet in den
unterschiedlichen Formaten Relevanz. Über seine Erfahrung an der MBB stärkt der
Bürger seine Bindung an das und seine Identifikation mit dem NTM.
Y más sobre Hoffnung auf größeres
Wohlbehagen: